Tarta de queso y frambuesas al horno con edulcorante ( 8 raciones ).

Gluten: Sí. Lactosa: Sí. Proteínas de leche de vaca: Sí. Azúcares añadidos: NO. Vegano: No. Calorías: 95. Coste: 3€.

Ingredientes: unos 200mg de frambuesas (podéis poner arándanos o fresas o lo que más os guste), dos cucharadas de harina de trigo, 3 huevos, 550gr de queso cremoso light, la ralladura de un limón o una naranja y 4 sobrecitos de edulcorante sucralín. En un bol batimos los tres huevos junto con el queso y la ralladura de limón o naranja. Yo he utilizado queso de untar light, se puede usar queso quark light que tiene menos calorías aún aunque queda un poquito más ácido. El sucralín es sucralosa, son moléculas de sacarosa tan grandes que el cuerpo no las absorbe por eso endulza 600 veces más que el azúcar pero no afecta a los niveles de glucosa en sangre, y por tanto es apto para diabéticos. Además no se modifica con el calor por lo que los pasteles no amargarán como con la sacarina. Yo para esta cantidad he puesto 4 sobrecitos y no queda excesivamente dulce, podéis probar y ajustar a vuestro gusto la próxima vez. Añadimos entonces las dos cucharadas de harina y mezclamos todo hasta que esté uniforme.

Añadimos entonces las frambuesas, yo las tenía congeladas pero si las tenéis frescas o las encontráis silvestres (próximamente) pues mejor. Habremos precalentado el horno a 180ºC. Para este pastel es muy útil un molde como este desmontable, yo para evitar untar con mantequilla o aceite le pongo papel de horno. Vertemos la mezcla y damos un golpe en la encimera para que salga el aire y quede uniforme. Hornearemos el pastel con el horno con calor arriba y abajo durante 35 minutos. Tiene que quedar mas doradito por los bordes y blando que se mueve un poco en el centro. Dejamos enfriar tal cual y después lo podremos desmoldar para servir. Está más rico si está frío, se compacta antes. Si no tenéis problema con el azúcar podéis reservar unas cuantas frambuesas, ponerlas encima tras cocerlo y espolvorear azúcar glas.